En los hornos a combustión se denomina carry over, o desempolvamiento, al material fino proveniente del manto de mezcla vitrificable no fundida aún (batch blanket) que es arrastrado en el flujo turbulento de los humos agotados y va a depositarse sobre las superficies de la tobera y los primeros tramos de los pilares refractarios del regenerador.

El particulado que constituye el carry over deriva de las materias primas usadas en la mezcla y puede en parte originarse también durante el proceso productivo. La naturaleza de tal material resulta particularmente problemático para la integridad estructural de los refractarios sobre los cuales se deposita, y en el tiempo puede llegar a obstruir los caminos de pasaje de humo y aire, reduciendo la eficiencia de intercambio térmico del regenerador o incluso comprometiendo su funcionalidad.

Medir el carry over para un determinado sistema horno /lote es de vital importancia para la correcta gestión operativa de la humidificación de la mezcla, de los parámetros de carga, del set-up de los quemadores, etc. Es útil además para una correcta programación de las intervenciones de mantenimiento eventualmente necesarios.

La Estación Experimental del Vidrio efectúa intervenciones en planta muestreando con un método dedicado los polvos de la tobera y en la cámara superior del regenerador, en modo de poder elaborar una estimación de la concentración media de polvos finos en humos calientes de combustión. Son empleadas sondas desarrolladas específicamente para capturar el particulado fino y separar la contribución de los polvos que se forman por condensación durante el enfriamiento (por ej. Sulfatos y cloruros, gaseosos a alta temp.) de aquellos del carry over verdadero (partículas originalmente sólidas a alta temperatura).